Cuando pasan los años, descubres que hay un mecanismo que abre ese magnífico espacio donde se acumulan las vivencias y de alguna forma se seleccionan los mejores momentos. Si tienen la oportunidad, de pasar unos días en familia, año tras año en un mismo lugar, de alguna forma en tu memoria personal, existe un espacio reservado para almacenar esos momentos tan especiales (el que coincida con un periodo vacacional ayuda) Personalmente me fascina cada vez que doy con el resorte, la cerradura o el pestillo que me permite acceder a ese mágico lugar que según dicen tiene forma de baúl.
Bueno, lo de la forma y lo de los “resortes” esos, no sabría decir si en mi caso es así, pero me gusta pensar que siempre hay algo escondido en nuestro interior, que cuando pones en ON ese artilugio, se abre en uno aquella escena vivida, aquella emoción sentida … cuando ocurre esto, no puedo más que atrapar ese recuerdo, saborearlo, revivirlo y conservarlo. Y todo esto me ocurre nada más llegar al lugar que acaba siendo habitual como destino de vacaciones; pues al abrir la puerta de ese apartamento, o al poner las ventanas en situación de “par” me llegan esas bocanadas pretéritas...aquella excursión de hace dos años, aquella canción que sonaba en el coche, o aquella serie de instantáneas que conservamos oro en paño para ubicar con exactitud, la forma, la luz, y los tonos con que tu familia se va haciendo, las niñas creciendo... y uno mismo aprende a saborear los buenos momentos.
Cuando escribo estas lineas se asoma el INFINITIVO del “volver”, sonrío con agrado en GERUNDIO por el reciente “disfrutando” y acto seguido pongo en marcha , un estupendo PARTICIPIO por lo nuevo que hemos “acumulado”. Siempre he sabido guardarme y saborear mi pasado, pero a medida, que los guardo en compañia de los míos, lo que más me satisface es no solo compartirlos sino pensar que mis pequeñas, comienzan con ese “almacenaje” lleno de sonrisas, anécdotas, y estupendos momentos de los que estoy convencido que los administrarán con gusto para cualquiera que sea su futuro.
Queridos Tíos V. y S. Otra cosa he aprendido, (huyo del tópico del no tener palabras) os traigo éstas, para agradeceros de forma enorme, pues con vuestro gesto año tras año, nos permitís tener en ese misterioso baúl, algo más grande que un rincón de buenos momentos. Tened seguro, que allí estais vosotros junto a los nuestros en el lugar de los “que no se olvidan”.
Es así, hay resortes de infinito que hacen del participio un sonoro gerundio.
ResponderEliminarSiendo, seguimos siendo intensamente en algunos lugares.
:))))))))))))
Mis resortes saltan mucho últimamente...y eso me suele dar mucha vida. Es maravilloso a veces observar lo que hemos vivido y que eso nos ha hecho grandes....a veces. Un abrazo
ResponderEliminarBuscando en el baúl de los recuerdos, u uuu, cualquier tiempo pasado nos parece mejor..lalala.
ResponderEliminarCasi todos mis recuerdos de infancia son de verano; las cabañas, los renacuajos, las excursiones a la fuente en bici...Cierro la tapa y me quedo un rato! Besos y gracias por la regresión.
Casi se puede recordar el sonido de los resortes que abren cajas mágicas, ¡y el sonido seco del baúl cuando se acercaba la abuela y te pillaba con las manos en la masa!
ResponderEliminarCuando me asaltan los recuerdos a veces me puede la melancolía. Espero aprender a verlos de otra manera como haces tú.
ResponderEliminar¡Qué familiar he sentido esta entrada! Magnífica, por cierto.
ResponderEliminarUn saludo
Lo que me gustó de tu entrada es que está acompañada con fotos de "entradas".
ResponderEliminarAsí que "me entró" bien.
Como cuando entras en la entrada de esas casa que "te entran". Dentro.
ANA, creo que a esas formas verbales les llaman Impersonales, debe ser que las formas que pueblan nuestros recuerdos si no son personales, si son intransferibles, intensamente, intransferibles...
ResponderEliminarWINNIE! Yo diría que para que salten esos resortes, has de bailar, sin perder ni ritmo, ni tiempo del momento...
MARTA, con esas, cabañas me has recordado, a mis primeros pitillos (y no quiero ponerme nicotínico) pero tenían un sabor tan especial...bss! (y de esos también recuerdo alguno)
PRINCESA DEL, definitivamente son mágicas, porque de una forma automática seleccionan los buenos sonidos, y los que en su momento desafinaron...el oído no los agudiza tanto o los olvida o los convierte en un leve susurro...
ResponderEliminarSUSANA, No creas, yo me traigo esa melodía de nostalgias, y no me importa mojarla con alguna lágrima (y no es de tristeza) sino que disponer de algún recurso para sorber, y saborear.
M DOLORES, ¿Has estado allí? Supongo que esa familiaridad la has sentido, porque te ha despertado algún recuerdo viajero...Me alegro!
ResponderEliminarDRIVER, las fotos son reales! Corresponden a ese magnífico lugar, que los tíos V y S nos dejan abierto, para que pasemos unos días estupendos, y llenemos algo de nosotros allí Dentro. Oye y que por fuera, hay mucho que poblar!
Ese baúl a veces es como la Caja de Pandora, está llena de demonios. Lo bueno es, con el tiempo, uno desecha los malos recuerdos y se queda con los buenos y cuando los rememora, parece que todo ocurrió anteayer, como si el tiempo no existiera, pero existe.
ResponderEliminarMe alegra que las vacaciones te hayan sentado tan bien. Un abrazo.
Me gustan tus resortes... esos que accionas, no sabes cómo y hacen aflorar esos recuerdos. Porque al accionarlos tú, has rozados los míos que me han hecho recordar... y sonreír. Y para mí es «vivir», «viviendo» y «vivido».
ResponderEliminarQué magnífica entrada, Tomae. Bella, sentida, cariñosa.
Besos miles, amigo
ZAMBU, Como decía aquel en esa peli, no sé que aspecto debe tener Pandora pero me gustaría tener las llaves de su caja (o algo así), y abrirla de vez en cuando...
ResponderEliminarLOLA, me encantan esos roces, con la memoria, no dejan de ser como los "toques virtuales" que te hacen saber que tu otro tú está o estuvo allí ;)
Guardo en mi baúl recuerdos muy intensos, varias vidas vividas en esta misma que he ido viviendo con distintas personas y que tenían todas el mismo sujeto. Los recuerdos vale la pena atesorarlos, ya sean buenos o malos porque ellos son la suma de lo que somos hoy. A veces atesorarlos significa abrir la tapa del baúl de vez en cuando o mantenerla cerrada para no recordar mucho, depende de cada uno.
ResponderEliminarYo solamente sé que hoy necesito recuerdos nuevos, algún nuevo cuento chino que creerme para poder seguir, porque a ratos mis recuerdos duelen demasiado, incluso cuando son los buenos.
Me ha encantado esta entrada Tomae. Es cierto que con los años, vamos manchando los recuerdos grises de colores pastel, aunque a veces las manchas sean un poco difíciles de quitar.
Besos, a Tomae y a los demás.
...Lisset tengo lo del cuento chino, como un encargo especial para ti, cuando lo tenga te lo traigo con mucho gusto. Besos!!
ResponderEliminarCharlie, Bravo. Atento.
ResponderEliminarCharlie, Bravo. Atento.
Aquí De Re Ii Ve Re, repito De Re Ve Ii Ve Re.
Localizados en la vertical de Las Azores.
Rumbo tres catorce dieciséis.
Velocidad, ciento veinte nudos y algún lío.
Destino Reus.
Llegada día 10-08-2011.
Hora zulú sin confirmar (depende de la climatología familiar).
Avisadostás.
Bravo Charli a la Escucha
ResponderEliminarLa ducha en la grucha
Desfrnados Empezamos
GinTonics Alerta
Cerveza en Cubierta
Zulus invitados a la fiesta.
Código Rojo.
ResponderEliminarRepito.
Código Rojo.
...
Falla en el depósito derecho.
Caída del hidraúlico.
Descendemos.
Descendemos mucho.
Mei Dei. (¿Dios mío?)
Repito.
Mei Dei.
Pérdida de sustentación.
Giroscopio locuelo.
Permiso para amerizar.
Repito.
Permiso para tomar agua. (Creo que la vamos a tomar toda, todiiiiita).
Te dejo mi colección de películas de Marilyn.
Repito.
Las pelis de Marilyn son tuyas; no dejes que mis cuñados se las lleven.
Próxima conexión a las 06:00 zulú y cuarto.
Qué bonita entrada :)
ResponderEliminarGracias Melón...Galo, me alegra que pases por aquí...bss!
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