… a mí me contaron la historia del paje Amir, y como me gustó, por eso se la traigo aquí.
Resulta que el tal Amir, era un escribano de la corte del Rey Herodes. Conocía todas las lenguas del Imperio, era educado y tenía el don de las letras. No siempre estaba de acuerdo de las artimañas reales... Cuando el rey Herodes dictó ese Edicto... Amir se vio atrapado en su condición de escribiente, y tuvo muy claro que ni lo redactaría, ni lo pasaría a limpio ni lo traduciría, y tomó la decisión de abandonar su trabajo y posición. Por ello tuvo que abandonar su tierra, familia y amistades. Emigró a Oriente.
Ya se pueden imaginar con quien tropezó el paje Amir... Los magos, conocedores de la irremediable situación no pudieron más que dar cobijo al joven Amir. Él agradecido con sus majestades, ofreció sus servicios de lector, traductor y de escribiente. Resultó ser un buen fichaje para sus majestades. No tienen más que ver los resultados.
Así que el paje Amir, era un auténtico colaborador tanto con Melchor con Gaspar y por supuesto con Baltasar. Amir consciente de la tragedia de Herodes, pensó que todo su esfuerzo y talento lo dedicaría a los niños, no porque fuera culpable de los hechos, sino porque pensaba que era ese su lugar en el mundo, y pensó que algo podría hacer para que ese mundo fuera mejor.
Cuentan entonces, que Amir era no sólo el encargado de recoger las cartas de todos los niños, sino que también de leérselas a sus Majestades, como tenia conocimiento de idiomas, y buena pronunciación los magos de Oriente, confiaron en él esta noble tarea además de otros asuntos relación de sus habilidades de lectura y escritura.
Amir era un paje muy listo y tenía muy buena memoria, y mientras leía aquellas cartas de los niños que le llegaban año tras año aprovechaba para aprenderse los nombres niños y niñas de todos los rincones del planeta. Así que conocía no sólo sus nombres, sino sus datos postales, y por supuesto sus gustos sino que aquellas frases que acompañaban los niños antes de hacer sus ilusionantes peticiones; con lo que acabó conociendo todo aquello se ve cuando lees aquellas preciosas cartas de Reyes.
A medida que avanzaba en sus tareas Amir fue consciente de lo maravilloso que era participar en ese mundo que llega de Oriente … los Magos viendo la ilusión con que Amir participaba en los asuntos reales le encargaron una importante misión...
Nota del A. De momento esto es lo que me contaron, sabía algo de esa misión, y estoy convencido que cada uno de ustedes también sabe en que consiste, porque sin lugar a dudas, el Paje Amir, leyó alguna de sus cartas y realizó alguna acción, así que estaría bien que la contaran... para la II parte.
Yo siempre quise ser mamá, y lo fui, primero de muchísimas muñecas, entre las que recuerdo a Laura, unas cuantas Barriguitas, Baby mocosete, Nenucos, minenes, y a Nancy, y luego, supongo que porque Amir sabía que había aprendido a cuidar a un pequeño, me dieron dos de carne y hueso. No sin antes poner a prueba mi paciencia, eso sí.
ResponderEliminarMi historia
...la Historia continuará Princesa...Del y te llenarán de besitos ;)
ResponderEliminarYo siempre quise conducir un Ferrari, así que Amir traducía mi carta a los Reyes Magos de una forma particular. Entre una petición y otra, decía lo del Ferrari, porque sabía cuánto lo deseaba.Por si colaba.
ResponderEliminar...
El viernes pasado por la tarde tuve suerte.
Estaba en un semáforo y se paró un Ferrari a mi lado.
Me acordé de Amir, saqué la mano por la ventanilla, la puse horizontal, y luego llamé la atención del conductor del Ferrari y baje repetídamente la punta de los dedos, solicitando que apretase el acelerador.
Y entonces ocurrió.
Amir le tradujo mi gesto al conductor.
Éste aceleró en repetidas ocasiones.
Y yo conseguí parte de mi sueño.
Oir la música de un Stradivarius, a 6500 R.P.M.
A mi me encantaba el sol y el calor ..... así que, con el tiempo, los reyes, los pajes y la corte ¡hicieron de mi una lagarta!
ResponderEliminarDriver ...estoy convencido que gran parte de la Misión de Amir consistía en eso ..hacernos soñar, a unos a 33 revoluciones, a otros a 45 y a Mr.D ...las que el motor le pide.
ResponderEliminar...Algo notaría en tus cartas de Lagartija, por algo te trajeron ese envoltorio que llevas bajo tí (tu)Corazóooooon! ...porque sólo es un envoltorio.
Siempre quise un oso de verdad y Amir me llenaba de peluches...¿seguro que era tan listo?. Eso sí ahora tengo un marido hermOSO, unos churumbeles amorOSOS, amigos de corazón bondadOSO que me convierten en osa dichosa!
ResponderEliminarsí, definitivamente, es lito!
Besosos!
Tal vez tú seas el paje Amir.
ResponderEliminarEn realidad... soy paje. Nada me hubiera gustado más. Aunque la memoria me falla bastante, la magia hace milagros.
ResponderEliminarTomaeeee que no me he olvidado de tíiii. Estaba revisando la correspondencia real, no comprendo como no entendió CUINA DE FUSTA I COMPLEMENTS... Tendrá que ver esto con el català?
ResponderEliminar... es listísimo Marta, porque aprendió de los mejores, tuvo excelentes Maestros, y las más ricas lecturas, imagina las cartas de los niños y niñas que pudo leer!!!
ResponderEliminar...tal vez lo seamos todos Zambu, y más que tal vez, diría que es así.
ResponderEliminarAmir... Cuanto nos honras con tu visita...¡siempre lo has hecho! De todas formas, creo que sus Majestades te encargaron una misión especial, y no sabría exactamente de que se trataba... creo que hiciste algo que aún perdura, y de los que muchas niñas y niños guardan muy buen recuerdo...¿nos podrías contar algo?
ResponderEliminar... no creo que se tratara de un regalo concreto Monty, diría que es algo que nos pasó a todos, y no lo digo por la CUINA de FUSTA... Sino por alguna acción que .... yo espero que él nos la desvele...
ResponderEliminarAunque parezca mentira...ya no me acuerdo de lo que quería... Escepto una bici, una BH blanca con cesta. Pero la cesta nunca llegó. Qué veranos con la bici... En la Gornal, el pueblo de mi abuela, de excursión con la pandilla del pueblo. De repente , como si nos hubiésemos hecho mayores de pronto, dejamos de pasar esas añoradas vacaciones. Y la casa ya está derribada. Un agujero de la infancia que lo ha robado un señor que la compró...
ResponderEliminarAl paje Amir ya no le pido nada material. ¿Has visto, Tomae? En nada se derrumban unos tochos construidos y ese sabor a casa de pueblo amueblada con austeridad y cariño. Donde mi padre vivió la guerra...
Lo que le pido al paje Amir ahora es un jueves que salga redondo.
Abrazos, broder.
Uno de los regalos que recuerdo fue "Diseño mi moda" o algo así que me lo trajeron por partida doble!! Tal fue mi deseo que hala! tuve por duplicado un juego de esos de crear moda (realmente eran dos versiones diferentes de un mismo juego).
ResponderEliminarAhora, Amir, ya sabe lo que quiero... :)
tomae, y tú qué le pediste?
Nunca conocí al paje Amir, ni a Los Reyes, pues donde me crié ese era un tema tabú. Mis padres me enseñaron en su lugar a celebrar cada año nuevo como algo maravilloso y lleno de oportunidades. Mi vida, que ha dado más vueltas que una peonza, ha retornado a sus raíces y hoy, mi hija sí conoce al paje Amir y a sus majestades los Reyes Magos de Oriente, ella escribe las cartas más generosas que he leído. De momento, los Reyes este año, nos están echando una mano con su petición de este año, un trabajo nuevo para Papá y Mamá, algo de trabajo entra aunque aún no suficiente. Con suerte el paje Amir que suele venir por aquí, me lee y le deja una notita a los Reyes para que no se olviden de mí. :))) Un abrazo.
ResponderEliminar...seguro que querías una cesta para llevar cosas en ella, y seguro que lo que hubieras puesto en esa cesta es lo que has ido construyendo...A lo mejor el paje Amir, no encontró una cesta tan grande...
ResponderEliminarUn abrazo Sunseta!
...yo creo que sigo pidiendo Melón...Galo, bueno eso es una forma de decir que no me aclaro con lo que quiero, de todas formas, Amir me enseño a hacer regalos (no a envolverlos) y eso me gusta más...
ResponderEliminarDerrochas positivismo Lisset!!! supongo que las ganas que tenías de los Magos las has acumulado para luego repartir a todos los lados donde gira la peonza esa que da tantas vuelta, pero siempre apoyada en un punto, tu hija sin lugar a dudas.
ResponderEliminar...los Reyes no se olvidarán...;)