No voy a redactar las bases de este post porque no las entendería ni yo. De hecho ya hace tiempo que tenía planteado montar este concurso de relatos y comentarios Anónimos. Del mismo modo que lo monto, les animo a participar y a votarse entre ustedes cual es el relato, comentario entre todos los Anónimos que se presenten a la cita, incluso a darse el premio, las "palmaditas" o la crítica constructiva.
Solo hay una condición, que para participar en el post solo lo pueden hacer anónimos. Solo se publicarán comentarios hechos por anónimos (los pseudónimos no valen). Hay libertad de expresión. Pueden decir lo que les venga en gana, y meterse con otros anónimos siempre que no citen nombres de nadie. El tema de sus comentarios es libre, y no esta acotado en palabras. (tampoco hace falta que se enrrollen) Pueden contestarse entre ustedes. Felicitarse, abroncarse, hacer preguntas, responderlas ...
Digan, Digan ...hagan uso de la palabra.
...y pásenlo bien.
PD. Cualquier comentario que no sea de un anónimo será eliminado.
Era un tipo que no sabía lo que quería ...pero eso sí que lo sabía y siempre buscaba.
ResponderEliminarSabía lo que quería, buscaba lo que no sabía.
EliminarGraciitas...te quierito ;)
EliminarJajajajajajajajajajaajajaja
Chico, que le voy a hacer, si el gamberreo es lo mío ;)
Sorrys....como soy un anónimo tan tan anónimo...me he equivocado al responder.....
EliminarMira ya si eso, lo pones tú dónde corresponde, que a mí me da perecita....
ZZZZZZZZzzzzzzzz........
Solo.
ResponderEliminarEn un autobús lleno de cables.
Y yo.
Lleno de lágrimas.
Había una vez un cuervo negro que quería tener plumas blancas. Le preguntó a la nieve sipodía ayudarle y la nieve le ayudó. Tan contento se puso el cuervo con sus plumas blancas que voló y voló y subió y subió...y el malandrín del sol se las comió.
ResponderEliminarBuscó el cuervo ayuda en casa del molinero y la molinera amable le ayudó con su harina. Tan contento se puso el cuervo que viló y voló y subió y subió y el viento ladino se las comió.
Buscó el cuervo, ya un poco preocupado, ayuda en casa del pastelero y la pastelera bondadosa le dio su azúcar glass. El cuervo estaba estupendo con sus plumas relucientes y voló y voló... pero le pesaba el cuerpo y bajó a descansar a la puerta de un colegio y los niños glotones se las comieron.
El cuervo pensó que si a la tercera no va la vencida sería mejor dejarse las uñas largas y hacerse tirabuzones. Se bue volando al bosque y se encontró un trozo de queso y recodando lo que le pasó a su tataratataratataratatara abuelo, se lo comió antes de que llegase la zorra, que tampoco tenía el pelo blanco.
Así el cuervo, fue un cuervo negro para siempre, pero con el estómago llenito.
BeXitos Anónimos.
Me gusta. Vamos, que me ha encantado!
EliminarSirva este comentario para decir que voto por este relato, sobre todo, para que su autor siga escribiendo más cosas, y de esta forma, los que las leemos, disfrutemos así mismo, de relatos tan bonitos.
qué dices! si es en blanco y negro / para gustos colores
Eliminar... para que puedas seguir las miguitas de pan.
EliminarAQUÍ . (Anónimoa equivocado)
No me gustan los comentarios anónimos.Un beso.
ResponderEliminarA mí me gusta jugar, ¡yo juego!
ResponderEliminarSi escribiera como normalmente lo hago aquí, mi retrato sería facilísimo de hacer. Por ahora sé... quien busca, el cuentista y la antianónimos... hasta el autobusero triste...aunque ahí, dudo.
…
¿Sabéis lo curioso de los ( algunos) comentarios anónimos? que da igual que lo sean, se sabe perfectamente quien lo ha escrito... ¡las letras tienen caras! delatan muchísimo más de lo que parece. Solo hay que mirarlos fijamente.
PD. También sé, que si uno se esfuerza mucho, se puede despistar a todo el mundo. :) jijijiji.
Erase una vez una chica que iba al paritorio, con ell miedo y los nervios logioos de un momento tan intenso y crucial.
ResponderEliminarTras tres horas de lucha entre las hormonas y el destino, vino al mundo una criatura sonrosada y pegajosa, que tras deslizarse a taves de la Via Lactea, acabo en manos de un doctor que sonreia.
Lavaron a la criatura, a la madre y a la conciencia de media Humanidad, quedando un resultado bastante presentable y equilibrado.
Al cabo de un dia, la madre y la criatura empezaron a conocerse de verdad.
Mirandose a la cara, agarrandose los dedos y compartiendo la lactosa que atravesaba el firmamento de la maternidad.
Y aquella primera tarde juntos, madre y criatura sintieron grandes sensaciones.
Pero yo no se las voy a contar.
Soy un simple anonimo.
Y a ti no te hace falta.
Simplemente,porque tu eras una de las dos personas que habia en aquella habitacion.
Aquella tarde, en aquella habitacion
Tu.
Yo, te cuento...
EliminarPorque estaba allí y sentí lo que cuentas, pero...
Nunca más.
Me separaron de ella ¿sabes?
Pasaron meses... años... muchos. Muchas lágrimas, mucha soledad, mucho dolor y miedo antes de que nadie me mirara con aquella ternura, ni me agarrara los dedos como ella lo hizo. Pensé muchas veces por qué alguien me había traído a este mundo para dejarme solo y perdido en él. Pensé muchas veces en ella, preguntándome donde estaría... pensé, que nadie debería ser obligado a venir a este mundo si no es fruto del amor, porque si no es así, no lo conoce.
Si no conoces el amor, no eres capaz de amar. Nadie te ha enseñado a hacerlo.
Hoy por primera vez en mi vida volví a sentir aquella mirada llena de ternura...
Por eso te escribo, sí.
Nadie merece vivir solo para sufrir,
ni generar tanto sufrimiento mientras mal vive...
Lo sé bien, he sentido todo lo que te cuento.
Te escribo desde el corredor de la muerte...
...Habrá otras historias felices, cierto.
La mía es esta. Recuérdame y recuérdaselo...
Atención! Relato:
ResponderEliminarDonde él quiere ir está demasiado alto.
Con decir que es alto hasta para mi mismo!
Yo se lo digo, se lo repito, se lo explico de mil maneras distintas, pero nada, él a lo suyo, ahí, dale que te pego, para arriba, sin descanso.
-Pero donde vas, insensato? Que allí arriba no hay nada!
Y él sigue.
Se ve que no me oye, o no quiere oirme.
Yo me rindo.
Allá él.
Cuando llegue arriba, si es que llega, solo le queda volver a bajar.
.....
Ves? Si es que no me haces caso!
Qué esperabas encontrar en un poste de la luz?
Título: Caracol despistado.
¿Quién le dijo a quién que le quería?
ResponderEliminarA quien le dijo, también quería.
Y a quién le dijo, le dijo que aprendería.
…
Que aprendería a querer ¿Cómo quién?
Quien le dijo a quién sabía…
Nadie le creía. Es más, lo había tenido a un palmo de la cara e incluso le había sonreído.
ResponderEliminar"No puede ser, sería la montura o el jinete, o el tardecer", le decían incrédulos.
"No! era así! yo lo he visto y me ha sonreído!", se desgañitaba en explicar.
"¿Como va a ser azul?¿No ves que es imposible? En todo caso verde....o amarillo...pero azul? Imposibe!!"
Nadie le creía pero lo había visto y es más, desde aquel día había dejado por fin de soñar.
"Si, aquel unicornio era azul y es más, me sonrió solo a un palmo de la cara"
Y esa, esa si que era la realidad.
http://youtu.be/a81AGfl0JOY
Desde el otro lado de la Galaxia.
ResponderEliminar01001, 0010011.
0101001, 1100100001, 0011001111100110.
Y entonces, 0010100011000111.
...
Porque siempre que 00110110, creemos que es imposible pero 0011001101110,
Nos sorprenderia conocer los limites de 001100, las cuestiones que vagan por el espacio 01 ?,
Y sobre todo, sobre todo, saber que 001101, 0001101111000111000 !
Que ni siquiera somos capaces de 001001 , ni de 0001110 , ni de imaginar siquiera.
Anonimo galactico.
Vamos amigo pollito, no me digas que te has perdido.
ResponderEliminarSi quieres llegar a la luna primero aprende a volar y luego, poco a poco, vuela hasta saber volar. Y bueno, ya cuando vueles, si eso, coge viento y alcanza la luna.
Me encanta ser anónimo. De ahora en adelante, siempre.
Pues es que me falta imaginación; no la tengo, la he buscado durante mucho tiempo y, nada, me esquiva siempre. Tan traidora es que se van con los otros. Así que me resigné y dejé de desearla.
ResponderEliminarLuego pensé ¿y si busco mi ingenio? Y por un momento, casi un suspiro, me acompañó. Y durante ese suspiro, soñé que sino podía ser imaginativa, sí podía ser ingeniosa. Pero, ay, fue un espejismo; también me abandonó: le gustaba más visitar otros pagos.
Todo eso que les cuento me produjo, primero, tristeza; mas luego, me indignó ¿por qué yo no y otros sí? ¿Qué podía tener que me distinguiera del resto? ¿Qué me hiciera especial?.
Reflexionando, observando .... lo comprendí; indiscutiblemente me caracteriza la MEDIOCRIDAD. Sí, señores, sí. ¡Ay de mi! Soy mediocre en la escritura, en el verbo, en la imaginación, en el ingenio.
Anónimamente mediocre ¿quién da más?
No digas eso, no se puede ser mediocre, y menos, si estás escribiendo en este blog.
EliminarComo no sabes quien soy, ni yo se quien eres, puedo regañarte, sin temor a que me tomes manía.
Así que ya sabes, déjate de tonterías.
Pelota!
Eliminar¿Por qué la gente disfruta tanto dando caña a la menor oportunidad? ...aunque sea suave...
EliminarRelato anónimo:
ResponderEliminarÉrase una bella señorita (cuyo nombre no se puede decir, porque es anónimo), que se encontraba en medio del bosque, feliz ella, y se encaminaba a visitar a una pariente (que tampoco se puede decir quien es, por la misma razón de que es anónimo), y que dicho sea de paso, su madre (que esa sí es verdad que no la conoce nadie, vamos, que es anónima total) era una irresponsable, se encontró con un individuo, el cual no tenía buenas intenciones.
Dicho individuo (que lógicamente tampoco se puede identificar, por la razón ya expuesta del anonimato) se la quería comer. Y para tal fin, en un alarde de inteligencia y estrategia mezcladas a partes iguales, se tomó la molestia de comerse a la pariente de la bella señorita, para después intentar engañarla con el viejo truco de disfrazarse de dicha pariente, y emulando su voz y su aspecto inocente, esperar el momento propicio para pillarla por sorpresa.
Y la bella señorita, cuando se encontró frente a su supuesta pariente, en vez de alegrarse de verla, se dedicó a criticarla. No paraba de sacarle defectos, que si los dientes demasiado grandes, que si las orejas, que si esto, que si lo otro...
Resumiendo, que el individuo en cuestión, se la comió, que creo yo, que más que por tener hambre (mucha no tendría, porque ya se había comido a la otra), sería por no aguantarla.
Después, según cuentan algunos (anónimos), pasó por allí un caballero con elegante porte, y también así mismo con otro "porte", digamos, un set de artilugios que sirven para matar, o sea, lo que viene a ser una escopeta de caza, le dio muerte al subsodicho individuo.
Y por esas leyes que rigen a veces los destinos de las personas, mira por donde, había unas tijeras a mano. Y con ellas, a modo de sastre improvisado, abrió la parte del cuerpo donde está el estómago, o sea, la parte que lo separa del mundo exterior, y rescató a la bella señorita y a su pariente, que por increible que parezca, estaban allí, vivitas y coleando, hablando de sus cosas, y sin tener ninguna noción de que por algún extraño motivo, el individuo en cuestión padecía de una enfermedad bastante inusual, se demoraba para iniciar el proceso de digestión.
Este relato se lo dedico a todas las personas que en algún momento de su vida han disfrutado, o sentido, o imaginado, o simplemente, aunque sea por un momento, han pensado que su color favorito es el rojo.
El mío es el azul, pero da igual.. tu cuento en el más profundo anonimato de una anónima que se llamaba Caperucita ;) ha sido una delicia.. shsssss! guardaré sepulcral silencio. Lo prometo.
EliminarPor aluviones me delato, me da igual. El mio es el verde que es la mezcla de azul y rojo y os delato. Verde esmeralda que me rasca la espalda y me delata. Y no dilato mi comentario porque sino guardo silencio, me tiran a la jauría.
EliminarOtro relato para el concurso de relatos anónimos:
ResponderEliminarHabía una vez... unos caballeros, repartidos por la geografía universal de esta nuestra España, que resultó ser que no se conocían, pero se enviaban misivas, a través de los medios de comunicación, o sea, internet.
Y también había una bella dama, que su vez, intercambiaba misivas de esas (vía internet), con los ya mencionados caballeros.
Y resultó que hubo un tiempo donde los cuatro se enviaban misivas, y hablaban de muchas cosas.
Y también, además de hablar de muchas cosas, hablaban de sus cosas, o sea, de sus cosas personales.
Y aunque en un principio no se conocían, después de hablar de muchas cosas, y después de llegar incluso al extremo de hablar de cosas personales, y aun manteniendo una comunicación continua, seguían sin conocerse.
Moraleja: Barrio de lujo al norte de Madrid.
Moratalaz está al este.
EliminarComo el Mar Mediterráneo.
Es así.
Si hay que hablar se habla......hablar pa na....
ResponderEliminarSi hay que cenar se cena....me voy a cenar!!